En la memoria de san Lesmes, Adelmo, visitamos el Monasterio de la Chaise Dieu, la Casa de Dios, que está en los orígenes de su vocación. Fundado por san Roberto de Turlandia, se trata de uno de los lugares más impresionantes del centro de Francia. Desgraciadamente, no logró superar la prueba de la Revolución Francesa. En cualquier caso, dejó en la Iglesia medieval frutos tan logrados como la santidad de Lesmes, o la fundación del Cebreiro, en el Camino de Santiago gallego.
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miércoles, 30 de enero de 2019
viernes, 10 de febrero de 2017
San Gregorio Magno. Sobre santa Escolástica
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Mantegna - Santa Escolástica |
Escolástica, hermana de Benito, dedicada desde su infancia al Señor todopoderoso, solía visitar a su hermano una vez al año. El varón de Dios se encontraba con ella fuera de las puertas del convento, en las posesiones del monasterio.
Cierto día, vino Escolástica, como de costumbre, y su venerable hermano bajó a verla con algunos discípulos, y pasaron el día entero entonando las alabanzas de Dios y entretenidos en santas conversaciones. Al anochecer, cenaron juntos.
Con el interés de la conversación se hizo tarde, y entonces aquella santa mujer le dijo:
«Te ruego que no me dejes esta noche y que sigamos hablando de las delicias del cielo hasta mañana.
A lo que respondió Benito:
«¿Qué es lo que dices, hermana? No me está permitido permanecer fuera del convento».
Pero aquella santa, al oír la negativa de su hermano, cruzando sus manos, las puso sobre la mesa y, apoyando en ellas la cabeza, oró al Dios todopoderoso.
Al levantar la cabeza, comenzó a relampaguear, tronar y diluviar de tal modo, que ni Benito ni los hermanos que le acompañaban pudieron salir de aquel lugar.
Comenzó entonces el varón de Dios a lamentarse y entristecerse, diciendo:
«Que Dios te perdone, hermana. ¿Qué es lo que acabas de hacer?».
Respondió ella:
«Te lo pedí, y no quisiste escucharme; rogué a mi Dios, y me escuchó. Ahora sal, si puedes, despídeme y vuelve al monasterio».
Benito, que no había querido quedarse voluntariamente, no tuvo, al fin, más remedio que quedarse allí. Así pudieron pasar toda la noche en vela, en santas conversaciones sobre la vida espiritual, quedando cada uno gozoso de las palabras que escuchaba a su hermano.
No es de extrañar que al fin la mujer fue la más poderosa que el varón, ya que, como dice Juan: Dios es amor, y, por esto, pudo más porque amó más.
A los tres días, Benito, mirando al cielo, vio cómo el alma de su hermana salía de su cuerpo en figura de paloma y penetraba en el cielo. El, congratulándose de su gran gloria, dio gracias al Dios todopoderoso con himnos y cánticos; y envió a unos hermanos a que trajeran su cuerpo al monasterio y lo depositaran en el sepulcro que había preparado para sí.
Así ocurrió que estas dos almas, siempre unidas en Dios, no vieron tampoco sus cuerpos separados ni siquiera en la sepultura.
San Gregorio Magno
Libro de los Diálogos (Lib II, 33: PL 66, 194-196)
jueves, 29 de octubre de 2015
domingo, 8 de marzo de 2015
miércoles, 4 de marzo de 2015
San Pedro, Abad de Cava
En el monasterio de Cava, en la Campania, san Pedro, que habiendo seguido desde su juventud vida eremítica, fue elegido obispo de Policastro, pero cansado del estrépito de la vida exterior, regresó al monasterio, donde, constituido abad, restableció admirablemente la disciplina (1123).
El Martirologio romano nos lleva hoy a uno de los Monasterios más célebres del sur de Italia: Cava de' Tirreni. Pedro de Cava o Pedro de Pappacarbone (Salerno, Campania, c. 1038 - Cava de' Tirreni, 1123) fue un obispo y abad benedictino italiano. Es recordado como abad tercero de la Abadía de Cava. Nacido en Salerno, era sobrino de Alfiero de Pappacarbone, noble salernitano que se había retirado par ahacer una vida heremítica y había fundado la Abadía de Cava, puesta bajo la observancia benedictina. Pedro ingresó bajo el mando del abada León I. Marchó a la Abadía de Cluny, doonde estuvo entre 1062 y 1068, y fue obispo de Policastro y, entre 1067 y enero de 1072, fue abad de San Arcangelo nel Cilento.
Fue elegido entonces coadjutor de la abadía de Cava por León I, hacia 1072 y renunció al obispado. Poco después, en noviembre de 1078 se convirtió en abad. Su mandato fue muy riguroso. Amplió el monasterio y consolidó la relación con otros monasterios que dependían, constituyendo una congregación benedictina sobre el modelo de la Congregación de Cluny. Creó así la llamada Orden de Cava, que acabó teniendo un papel relevante en el sur de Italia. Redactó las Constitutiones Cavensis a partir de les constituciones de Cluny. En 1092 recibió en la abadía el papa Urbano II, que consagró la basílica. Renunció al cargo después de muchos años de gobierno y murió haciendo vida hermética en la cueva de Arsicia, cerca de la abadía. Le sucedió Constable, que era entonces el coadjutor.
Con tal motivo, vamos a visitar el Monasterio de Cava, a través de un reportaje de la Televisión Italiana, con motivo de su milenario, el año 2011.
martes, 10 de febrero de 2015
San Gregorio Magno. Sobre santa Escolástica
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Mantegna - Santa Escolástica |
Escolástica, hermana de Benito, dedicada desde su infancia al Señor todopoderoso, solía visitar a su hermano una vez al año. El varón de Dios se encontraba con ella fuera de las puertas del convento, en las posesiones del monasterio.
Cierto día, vino Escolástica, como de costumbre, y su venerable hermano bajó a verla con algunos discípulos, y pasaron el día entero entonando las alabanzas de Dios y entretenidos en santas conversaciones. Al anochecer, cenaron juntos.
Con el interés de la conversación se hizo tarde, y entonces aquella santa mujer le dijo:
«Te ruego que no me dejes esta noche y que sigamos hablando de las delicias del cielo hasta mañana.
A lo que respondió Benito:
«¿Qué es lo que dices, hermana? No me está permitido permanecer fuera del convento».
Pero aquella santa, al oír la negativa de su hermano, cruzando sus manos, las puso sobre la mesa y, apoyando en ellas la cabeza, oró al Dios todopoderoso.
Al levantar la cabeza, comenzó a relampaguear, tronar y diluviar de tal modo, que ni Benito ni los hermanos que le acompañaban pudieron salir de aquel lugar.
Comenzó entonces el varón de Dios a lamentarse y entristecerse, diciendo:
«Que Dios te perdone, hermana. ¿Qué es lo que acabas de hacer?».
Respondió ella:
«Te lo pedí, y no quisiste escucharme; rogué a mi Dios, y me escuchó. Ahora sal, si puedes, despídeme y vuelve al monasterio».
Benito, que no había querido quedarse voluntariamente, no tuvo, al fin, más remedio que quedarse allí. Así pudieron pasar toda la noche en vela, en santas conversaciones sobre la vida espiritual, quedando cada uno gozoso de las palabras que escuchaba a su hermano.
No es de extrañar que al fin la mujer fue la más poderosa que el varón, ya que, como dice Juan: Dios es amor, y, por esto, pudo más porque amó más.
A los tres días, Benito, mirando al cielo, vio cómo el alma de su hermana salía de su cuerpo en figura de paloma y penetraba en el cielo. El, congratulándose de su gran gloria, dio gracias al Dios todopoderoso con himnos y cánticos; y envió a unos hermanos a que trajeran su cuerpo al monasterio y lo depositaran en el sepulcro que había preparado para sí.
Así ocurrió que estas dos almas, siempre unidas en Dios, no vieron tampoco sus cuerpos separados ni siquiera en la sepultura.
San Gregorio Magno
Libro de los Diálogos (Lib II, 33: PL 66, 194-196)
sábado, 31 de enero de 2015
Abadía de Pannonhalma (Hungría)
Visitamos hoy uno de los monasterios benedictinos más importantes del centro de Europa, la Abadía de Pannonhalma, en Hungría. Los monjes benedictinos no sólo celebran solemnemente el Oficio Divino en su suntuoso templo, sino que también mantienen un importante centro educativo, donde ejercen la docencia varios monjes.
viernes, 30 de enero de 2015
La Chaise Dieu
En la memoria de san Lesmes, Adelmo, visitamos el Monasterio de la Chaise Dieu, la Casa de Dios, que está en los orígenes de su vocación. Fundado por san Roberto de Turlandia, se trata de uno de los lugares más impresionantes del centro de Francia. Desgraciadamente, no logró superar la prueba de la Revolución Francesa. En cualquier caso, dejó en la Iglesia medieval frutos tan logrados como la santidad de Lesmes, o la fundación del Cebreiro, en el Camino de Santiago gallego.
viernes, 19 de diciembre de 2014
viernes, 28 de noviembre de 2014
domingo, 7 de septiembre de 2014
Maria Lach
Visitamos uno de los más célebres monasterios alemanes, fundamental para comprender, desde finales del siglo XIX, la evolución del llamado Movimiento Litúrgico Católico, con la figura de Odo Cassel y sus estudios sobre el origen de la liturgia cristiana en relación con los misterios. Habita este monasterio una comunidad de monjes benedictinos, pertenecientes a la Congregación de Beuron.
lunes, 7 de abril de 2014
Ottobeuren
Breve visita a uno de los monasterio históricos de Baviera: Ottobeuren, perteneciente a la Congegación Benedictina Bávara.
lunes, 31 de marzo de 2014
Monasterio de Cava dei Tirreni
Visitamos hoy un venerable monasterio italiano, Cava dei Tirreni. Fundado hace más de mil años, cuenta con varios santos entre sus monjes y abades. La historia ha ido acumulando un rico patrimonio. Ojalá que el Señor permita un resurgimiento espiritual, antes de que esa comunidad termine extinguiéndose.
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